La frecuencia con la que se lava el plato donde comen los perros puede afectar la salud humana
- Obtener vínculo
- X
- Correo electrónico
- Otras apps
Un estudio reveló que la mayoría de los propietarios desconoce las pautas sobre el manejo seguro de alimentos para mascotas
La forma en que se almacena y prepara la comida las mascotas y cómo se lavan sus platos puede tener consecuencias negativas para la salud si no se hace correctamente, tanto para humanos como para animales, según un nuevo estudio.
La investigación, realizada por la la Universidad Estatal de Carolina del Norte y publicada en la revista PLOS ONE, analizó los hábitos de alimentación de los dueños de perros en Estados Unidos y halló que la mayoría de los propietarios desconoce las pautas sobre el manejo seguro de alimentos para mascotas y comederos que establece la Administración de Alimentos y Medicamentos de EEUU (FDA).
Estas pautas incluyen una serie de medidas básicas de higiene, como lavarse las manos con jabón y agua caliente antes y después de preparar la comida de las mascotas durante al menos 20 segundos; lavar los platos y utensilios utilizados para preparar la comida para mascotas con jabón y agua caliente después de cada uso; utilizar un utensilio, como una cuchara o taza limpia, para verter la comida en el plato de la mascota. Las recomendaciones también incluyen desechar los alimentos para mascotas que estén caducados o que se hayan echado a perder, por ejemplo, deshaciéndose de ellos en una bolsa de plástico cerrada dentro de un contenedor de basura con tapa.
El estudio advirtió que la manipulación de alimentos y comederos para mascotas implica riesgos potenciales para la salud tanto de perros como de personas, especialmente aquellos con sistemas inmunológicos comprometidos.
Los platos de comida para mascotas se han clasificado entre los objetos domésticos más contaminados, a veces incluso con cargas bacterianas cercanas a las de los inodoros, según estudios publicados en los últimos 15 años.
“Se han producido múltiples brotes de enfermedades bacterianas entre perros y humanos como resultado de alimentos para perros contaminados”, apuntan los investigadores.
El estudio encuestó a 417 propietarios de perros. Los investigadores encontraron que apenas el 4,7 % de los 417 dueños de perros encuestados conocían las pautas de manipulación de alimentos para mascotas y de higiene de los platos de la FDA; por otro lado, el 43 % de los participantes almacenó comida para perros a menos de 1,5 metros de la comida para humanos, sólo el 34 % se lavó las manos después de preparar la comida y el 33 % preparó la comida para perros en superficies de preparación destinadas al uso humano.
Para comprender mejor los efectos de las recomendaciones de la FDA, los investigadores también analizaron 68 platos para perros en busca de contaminación bacteriana.
Después de la prueba inicial, dividieron a los propietarios en tres grupos con diferentes instrucciones para implementar las pautas de manipulación de alimentos, luego testaron los platos nuevamente después de una semana.
Los resultados hallaron
una contaminación significativamente reducida en los platos de los propietarios que siguieron las pautas de manipulación de alimentos para mascotas de la FDA, en comparación con los de los propietarios de mascotas a los que no se les pidió que implementaran ninguno de los protocolos.
Las “directrices de limpieza y desinfección de los platos para humanos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. se basan en lograr una reducción de 5 log en el recuento de bacterias”, escribieron los autores. Una reducción de 1,5 log equivale a una reducción del 90 % al 99 % en microorganismos; una reducción de 5 log significa que el 99,999 % de los microorganismos han muerto.
Sobre la base de sus hallazgos, los investigadores propusieron sugerencias para reducir la contaminación en los comederos de alimento para mascotas enfocadas a propietarios, veterinarios, vendedores de alimentos para mascotas y fabricantes.
Los autores dijeron que creen que esta educación es especialmente importante para las poblaciones vulnerables, como las personas inmunodeprimidas.
Las sugerencias incluyen garantizar que los miembros del hogar que alimentan a las mascotas cumplan con las pautas de la FDA y se incluya información escrita sobre las pautas durante la venta de alimentos para mascotas.
“La mayoría de los dueños de mascotas no saben que los comederos de estas pueden ser una fuente oculta de bacterias en el hogar. Saber cómo mitigar este riesgo y practicar el almacenamiento y la higiene adecuados de los alimentos para mascotas puede hacer que el hogar sea más saludable”, concluyeron.
- Obtener vínculo
- X
- Correo electrónico
- Otras apps
Comentarios
Publicar un comentario